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¿Que mató a la rana?

 

img_4978Hace unos días leí en una reflexión que llamó poderosamente mi atención. Hablaba sobre la muerte de una rana.

El artículo decía que las ranas no son de los animales mas listos dentro de la fauna que puebla la naturaleza, y como todos los animales que están en la parte baja de la cadena alimenticia, tienen muchos depredadores acechándoles, han desarrollado un avispado instinto de supervivencia.
No obstante, resulta curioso comprobar que si echas una rana a una cazuela con agua ardiendo, ésta salta inmediatamente para intentar salir lo más rápido que pueda y con los menores daños posibles.

En cambio, si la echas en una cazuela con agua templada, la rana no salta sino que se acomoda en el fondo de la cazuela y se queda allí.

Si pones la cazuela a fuego lento y el agua se va calentando, la rana no se mueve, si no que se va aclimatando y se queda tranquila,

La rana tiene la habilidad de ajustar su temperatura corporal. Por eso, cuando se va calentando el agua ella simplemente hace ajustes a su temperatura, y se mantiene ajustándola conforme va aumentando la temperatura del agua.

Justo cuando el agua está a punto de alcanzar el punto de ebullición, la rana, decide saltar, porque ya no puede atemperarse más, pero ahora ya es incapaz de hacerlo porque ha perdido toda su fuerza adaptando su temperatura corporal.

Muy pronto la rana muere.

La gran pregunta es: ¿Qué mató a la rana?

Mucha gente dirá:  “A la rana la mató el agua hirviendo.” Me parece que no es así. Lo que realmente mató a la rana fue su propia incapacidad para decidir cuándo saltar.

Hay momentos en los que necesitamos hacer frente a la situación y tomar las acciones apropiadas antes de estar incapacitados para saltar.

No deja de ser alarmante la similitud que existe entre esta situación y la que sufrimos muchos seres humanos en muchas y diversas situaciones.

Es vital que no nos pase lo que la rana… aclimatándonos hasta el punto de que cuando decidimos saltar, ya es imposible.

¡Decidamos cuándo saltar!

Si permitimos que la gente nos explote física, emocional, financiera, espiritual o mentalmente continuarán haciéndolo. Podríamos poner miles de ejemplos de ello.

Simplemente como ciudadanos, todos los capitalinos estamos hartos del abuso del gobernador, pero seguimos aclimatándonos a que nos suban y suban la temperatura del agua.

Todos sabemos (científicamente comprobado por diversas fuentes autorizadas) que el parque vehicular en su totalidad no llega al 20% como causa de la contaminación.

Decretar un “no circula”, no alcanza a resolver el 4% y un “doble no circula”, no resuelve ni el 8% de la contaminación.  Lo cual indica que prohibiendo la circulación del 40% de los vehículos, quedará por resolver el 92% de la contaminación. Sin contar con que los vehículos que más contaminan son los públicos.

Esa simple medida a mí en lo personal me afecta en mis negocios proporcionalmente a la reducción que hacen de los vehículos, es decir, un “no circula” me afecta el 20% de mis ingresos y, un “doble no circula”, el 40%.

Me pregunto ¿a cuántos más no afecta de la misma manera?  ¿Estará consciente este individuo que está matando la de por sí deprimida economía de la Ciudad de México?

Pero eso sí vemos bloqueos absurdos, obras abandonas y mal organizadas, pésima coordinación de semáforos, marchas autorizadas o al menos toleradas sin la mínima reacción de la autoridad, foto-multas ilógicas, un nuevo reglamento de tránsito pésimamente mal planeado o incluso me atrevo a decir malintencionadamente mal planeado… y nosotros, los ciudadanos, seguimos como la rana, aclimatándonos al son que nos toquen según los antojos o intereses del gobernador.

Nos prometió el presidente reducir substancialmente el numero de congresistas y a cambio sólo vemos gente incapaz de irse a dormir al congreso y levantar la mano como borregos por lo que les diga su partido, ya sea concertado entre todos los partidos o no, como por ejemplo cuando rechazaron aprobar la ley anticorrupción (Ley 3 de 3).
Esto nos ocurre porque los ciudadanos nos hemos acostumbrado al agua tibia y no ponemos un alto cuando cuando nos van subiendo la temperatura del agua.

No se trata de conseguir un poco de agua fría para echarle a la cacerola, comprando un auto más en el ejemplo del no circula y no se trata solamente de quejarnos del abuso, se trata de saltar a tiempo. Antes de que sea demasiado tarde.

Esto nos pasa en lo personal y en lo colectivo. Nuestro sistema nervioso colectivo es como el de la rana. A veces necesitamos una sacudida repentina antes de cobrar consciencia del peligro.

Es propio de la naturaleza humana tardar en entender todos los hechos.
Pero llega el momento de la verdad y es cuando hay que reaccionar.

Saltemos mientras tengamos la fuerza. Tenemos que estar conscientes de que:

“Nadie va a saltar por nosotros”

Carlos Molinar

«Soltar el vaso y viajar ligero»

 

Hay un dicho de la sabiduría popular que dice que: » Nadie sabe lo que pesa el saco, más que aquel que lo va cargando. A mi, me parece que ese dicho encierra una gran verdad. Yo diría que habría que agregarle algo: » y no sólo sabe lo que pesa, sino cuánto tiempo lleva cargándolo.

Por eso es difícil juzgar. Porque, por buena información que se tenga sobre determinada situación, siempre habrá cosas que no conozcamos y que hacen muy difícil verter una opinión subjetiva que además contemple casi todas las aristas que algo conlleva.

El peso específico es un problema serio, por donde quiera que se vea, pero siempre hay otros factores que influyen y que no son considerados cuando se juzga determinada situación.

Una Psicóloga en una sesión grupal, levantó un vaso de agua. Todos los participantes esperaban la pregunta: ¿Está medio lleno o medio vacío?, sin embargo ella preguntó: ¿Cuánto pesa este vaso?

Las respuestas variaron entre 200 gramos y 400 gramos. La psicóloga respondió: «El peso absoluto del vaso no es lo más importante, depende de cuánto tiempo lo sostengo. Si lo sostengo un minuto, no es problema, si lo sostengo una hora me dolerá el brazo, pero si lo sostengo durante todo el día, el brazo se me entumecerá y se paralizará. El peso del vaso no cambia, pero mientras más tiempo lo sujeto más pesado se vuelve. Y continuó, las preocupaciones, son como el vaso de agua, si piensas en ellas un rato no es un problema, si piensas en ellas más tiempo, empieza a doler, pero si piensas en ellas todo el día, terminarás paralizado e incapaz de hacer nada. «Acuérdate de soltar el vaso».

En esta vida todos tenemos más o menos preocupaciones, pero tenemos que acostumbrarnos a «soltar el vaso».

Si hacemos la analogía con el equipaje que llevamos a un viaje, nos ejemplifica de manera muy clara como vamos por la vida cargando un sin fin de cosas que no vamos a necesitar para ese viaje y además de todo viajamos con los brazos entumidos, paralizados y llenos de dolor cargando vasos que no necesitamos y que no nos dejan vivir.

Si queremos ser felices, tenemos que viajar ligero por la vida. Tenemos que «liberarnos» de tantos vasos que llevamos cargando por mucho tiempo inútilmente.

Yo pienso que algo que nos puede dar una ligera idea de cómo nos afectan algunas cosas que quizás no nos deben incumbir o que ya no necesitamos para nada, se refleja en ciertos malos sueños que tenemos. Hay veces que me despierto de un mal sueño, en el que se reflejan cosas que me preocuparon en el pasado y que ya no tienen importancia en mi vida actual y aunque se tratara de algo que nos atañe actualmente, la solución a ello no es preocuparse.

Cuando yo me despierto con una preocupación de un problema actual, lo que trato de hacer es analizarla y tratar de resolverla de la manera más práctica que puedo, si es que puedo resolverla, porque muchas veces no está en nuestras manos llevar a cabo ciertas acciones para resolver algo.

Es terrible si pensamos en el peso específico de ciertas preocupaciones y como se multiplica conforme pasa el tiempo y las seguimos cargando. Por lo que en mi opinión debemos hacer todo lo que esté en nuestras manos para resolver algo que nos afecta, sin preocuparnos de que las cosas salgan de determinada manera. A eso llamo yo «confiar en la vida, confiar en el bien», aunque a veces me sorprendo al descubrirme cargando vasos que ni siquiera son míos.

Así que ojalá entendamos que de nada sirve ir por la vida cargando un vaso que sólo terminará por entumecernos, paralizarnos y dolernos sin sentido. Ocupémonos en lo que esté en nosotros resolver y despreocupémonos de todas las cosas, dejando que la vida haga su papel y el resultado seguramente será el mejor que podía resultar y en adición, al menos nosotros, no viviremos entumidos, viviremos sin dolor, viajando por la vida ligeros de equipaje.

Homenaje a Eduardo Galeano

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 Homenaje a Eduardo Galeano
 
Uno de mis autores favoritos es Eduardo Galeano, pensador y escritor uruguayo, censurado por las dictaduras de Uruguay, Argentina y Chile. Si me preguntaran ¿Cómo definiría a Eduardo Galeano?, lo primero que se me ocurre es decir que no sería sencillo hacerlo. 
 
Hay muchos adjetivos que le van tan bien. Él, es simplemente como es, valiente, transparente, profundo, agudo, denunciante, rebelde ante un mundo que tiene tanto por mejorar.
 
Hoy he decidido a manera de homenaje hacer una entrevista ficticia, lo cual es totalmente irreverente, dado que yo, soy sólo un escritor silvestre que le admira, pero me tomaré el atrevimiento para hacerlo, con la única intención de darles a conocer a los lectores algunas de sus frases, que en caso de que ya las conozcan, me atrevo a decir, que son tan buenas, tan reales, tan profundas y agudas que vale la pena releerlas.
 
Aclaro entonces después de disculparme con ustedes y con el mismo Galeano, que mis preguntas son sólo un intento por acomodar cierta lógica a sus respuestas (las cuales son todas, frases auténticas de Galeano). 
 
Sin embargo estoy seguro que si esta entrevista ficticia, fuese verdadera, sus respuestas quizás serían diferentes y mucho más agudas, mismas que probablemente nos llevarían a otras reflexiones.
 
Así que así, sin más ni más inicio esta entrevista inventada por mí, pero con respuestas reales de Galeano:
 
¿Cómo se definiría a sí mismo? 
 «Soy un loco que sueña un mundo sin militares. Soy un loco enamorado de la vida”.
«Soy un escritor que quisiera contribuir al rescate de la memoria secuestrada de toda América, pero sobre todo de América Latina, tierra despreciada y entrañable”
 
¿Para quién escribe usted?
«Yo escribo para quienes no pueden leerme. Los de abajo, los que esperan desde hace siglos en la cola de la historia, que no saben leer o no tienen con qué».
 
Entonces ¿no es usted un escritor de un determinado género?
«Por suerte creo que estoy fuera de los géneros. Y eso es el resultado de muchos años de trabajo en que fui descubriendo que lo mío era una síntesis de diferentes géneros. Una tentativa de síntesis para recuperar la unidad perdida del lenguaje humano».
 
 ¿Por qué ser rebelde? 
 «Un hombre tiene que tener siempre el nivel de la dignidad por encima del nivel del miedo».
«Ojalá podamos ser desobedientes, cada vez que recibimos órdenes que humillan nuestra conciencia o violan nuestro sentido común”.
 
¿Cree en la libertad? 
«Quien no está preso en la necesidad, está preso del miedo: Unos no duermen por la ansiedad de tener las cosas que no tienen, y otros no duermen por el pánico de perder las cosas que tienen”.
 
¿Cree usted que el miedo es una constante de nuestro tiempo?
«Quien no tiene miedo al hambre, tiene miedo a la comida. Los automovilistas tienen miedo de caminar y los peatones tienen miedo de ser atropellados»
 
¿Qué opina del hombre moderno y de la influencia de la tecnología en su desarrollo individual?
«Al Norte y al Sur, al Este y al Oeste, el hombre serrucha la rama donde está sentado”
“La Cibercomunidad naciente encuentra refugio en la realidad virtual, mientras las ciudades tienden a convertirse en inmensos desiertos llenos de gente, donde cada cual vela por su santo y está cada cual metido en su propia burbuja”
 
¿Podremos realmente cambiar? 
«Hay quienes creen que el destino descansa en las rodillas de dioses, pero la verdad trabaja, como un desafío candente, sobre las conciencias de los hombres”.
«El destino no está escrito, lo escribimos nosotros todos los días, todo el día».
 
¿Entonces hay esperanza de que este mundo cambie para mejor?
«Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo”
«Son cosas chiquitas. No acaban con la pobreza, no nos sacan del subdesarrollo, no socializan los medios de producción y de cambio, no expropian las cuevas de Alí Babá. Pero quizás desencadenen la alegría de hacer, y la traduzcan en actos. Y al fin y al cabo, actuar sobre la realidad y cambiarla, aunque sea un poquito, es la única manera de probar que la realidad es transformable”.
 
¿Qué tan importante es la acción? 
«Al fin y al cabo, somos lo que hacemos para cambiar lo que somos”.
 
¿Habrá entonces que perseguir nuestros ideales por más utópicos que parezcan?
«La utopía está en el horizonte. Camino dos pasos y el horizonte se corre dos pasos, camino diez pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. ¿Entonces para qué sirve la utopía? Para eso, sirve para caminar».
 

   Para mi sería un privilegio poder hacer una charla de café con Eduardo Galeano, y preguntarle tantas cosas, quizá algún día tenga la oportunidad de hacerlo, mientras tanto me quedo con mis preguntas inventadas y sus respuestas reales. Les recomiendo no sólo leerlo, sino escucharlo, porque para aquellos que nos gusta cuestionarnos cosas , sin duda alguna Galeano es de esos autores que nos aclara muchas cosas o mejor aún, que nos hace cuestionarnos a nosotros mismos y a nuestros paradigmas.

 

Galeano

 
Uno de mis autores favoritos es Eduardo Galeano, pensador y escritor uruguayo, censurado por las dictaduras de Uruguay, Argentina y Chile. Si me preguntaran ¿Cómo definiría a Eduardo Galeano?, lo primero que se me ocurre es decir que no sería sencillo hacerlo. 
 
Hay muchos adjetivos que le van tan bien. Él, es simplemente como es, valiente, transparente, profundo, agudo, denunciante, rebelde ante un mundo que tiene tanto por mejorar.
 
Hoy he decidido a manera de homenaje hacer una entrevista ficticia, lo cual es totalmente irreverente, dado que yo, soy sólo un escritor silvestre que le admira, pero me tomaré el atrevimiento para hacerlo, con la única intención de darles a conocer a los lectores algunas de sus frases, que en caso de que ya las conozcan, me atrevo a decir, que son tan buenas, tan reales, tan profundas y agudas que vale la pena releerlas.
 
Aclaro entonces después de disculparme con ustedes y con el mismo Galeano, que mis preguntas son sólo un intento por acomodar cierta lógica a sus respuestas (las cuales son todas, frases auténticas de Galeano). 
 
Sin embargo estoy seguro que si esta entrevista ficticia, fuese verdadera, sus respuestas quizás serían diferentes y mucho más agudas, mismas que probablemente nos llevarían a otras reflexiones.
 
Así que así, sin más ni más inicio esta entrevista inventada por mí, pero con respuestas reales de Galeano:
 
¿Cómo se definiría a sí mismo? 
 «Soy un loco que sueña un mundo sin militares. Soy un loco enamorado de la vida”.
«Soy un escritor que quisiera contribuir al rescate de la memoria secuestrada de toda América, pero sobre todo de América Latina, tierra despreciada y entrañable”
 
¿Para quién escribe usted?
«Yo escribo para quienes no pueden leerme. Los de abajo, los que esperan desde hace siglos en la cola de la historia, que no saben leer o no tienen con qué».
 
Entonces ¿no es usted un escritor de un determinado género?
«Por suerte creo que estoy fuera de los géneros. Y eso es el resultado de muchos años de trabajo en que fui descubriendo que lo mío era una síntesis de diferentes géneros. Una tentativa de síntesis para recuperar la unidad perdida del lenguaje humano».
 
 ¿Por qué ser rebelde? 
 «Un hombre tiene que tener siempre el nivel de la dignidad por encima del nivel del miedo».
«Ojalá podamos ser desobedientes, cada vez que recibimos órdenes que humillan nuestra conciencia o violan nuestro sentido común”.
 
¿Cree en la libertad? 
«Quien no está preso en la necesidad, está preso del miedo: Unos no duermen por la ansiedad de tener las cosas que no tienen, y otros no duermen por el pánico de perder las cosas que tienen”.
 
¿Cree usted que el miedo es una constante de nuestro tiempo?
«Quien no tiene miedo al hambre, tiene miedo a la comida. Los automovilistas tienen miedo de caminar y los peatones tienen miedo de ser atropellados»
 
¿Qué opina del hombre moderno y de la influencia de la tecnología en su desarrollo individual?
«Al Norte y al Sur, al Este y al Oeste, el hombre serrucha la rama donde está sentado”
“La Cibercomunidad naciente encuentra refugio en la realidad virtual, mientras las ciudades tienden a convertirse en inmensos desiertos llenos de gente, donde cada cual vela por su santo y está cada cual metido en su propia burbuja”
 
¿Podremos realmente cambiar? 
«Hay quienes creen que el destino descansa en las rodillas de dioses, pero la verdad trabaja, como un desafío candente, sobre las conciencias de los hombres”.
«El destino no está escrito, lo escribimos nosotros todos los días, todo el día».
 
¿Entonces hay esperanza de que este mundo cambie para mejor?
«Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo”
«Son cosas chiquitas. No acaban con la pobreza, no nos sacan del subdesarrollo, no socializan los medios de producción y de cambio, no expropian las cuevas de Alí Babá. Pero quizás desencadenen la alegría de hacer, y la traduzcan en actos. Y al fin y al cabo, actuar sobre la realidad y cambiarla, aunque sea un poquito, es la única manera de probar que la realidad es transformable”.
 
¿Qué tan importante es la acción? 
«Al fin y al cabo, somos lo que hacemos para cambiar lo que somos”.
 
¿Habrá entonces que perseguir nuestros ideales por más utópicos que parezcan?
«La utopía está en el horizonte. Camino dos pasos y el horizonte se corre dos pasos, camino diez pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. ¿Entonces para qué sirve la utopía? Para eso, sirve para caminar».
 

   Para mi sería un privilegio poder hacer una charla de café con Eduardo Galeano, y preguntarle tantas cosas, quizá algún día tenga la oportunidad de hacerlo, mientras tanto me quedo con mis preguntas inventadas y sus respuestas reales. Les recomiendo no sólo leerlo, sino escucharlo, porque para aquellos que nos gusta cuestionarnos cosas , sin duda alguna Galeano es de esos autores que nos aclara muchas cosas o mejor aún, que nos hace cuestionarnos a nosotros mismos y a nuestros paradigmas.

 

La paternidad es una decisión

Bebe1En alguna ocasión leyendo a José Luis Martín Descalzo me golpeó un concepto que expresaba en su reflexión: “ Todos los padres son adoptivos”. JLMD sustentaba que la verdadera paternidad, se reducía a una decisión, que una persona tomaba en determinado momento de su vida, en la interacción con otra persona y definía que el hecho de ser padre o madre biológica o no serlo, era una situación que carecía de importancia y yo estoy totalmente de acuerdo con él.

 

JLMD decía que había un momento en que una persona tomaba la decisión de ser Padre o Madre de una persona y que a partir de ese momento y para siempre, nada ni nadie podría hace que cambiara esa decisión, no importando lo que sucediera. JLMD decía que es momento no necesariamente se reducía al momento del nacimiento, sino que podía ser la primera vez que lo cuidaba al enfermarse o simplemente en un bello momento en el que el bebe le apresara un dedo con su pequeña mano, porque entonces lo habría atrapado de por vida.

 

Yo estoy totalmente de acuerdo con JLMD, porque para mí el ser padre o madre se reduce a una decisión y el serlo biológicamente pierde toda importancia. De hecho me impacta la claridad con que lo veía y expresaba JLMD, ya que él era otra clase de Padre (Sacerdote).  Y yo estoy convencido de que hay cosas en la vida que solamente al vivirlas podemos comprenderlas en su entera dimensión.

 

De hecho yo pienso que somos unos antes de ser padres y otros muy distintos después de serlo, ya que veremos de una forma la vida antes y después y ya nada volverá a se lo mismo porque ciertos paradigmas nos cambian de golpe y bien dice Einstein, que una mente que ha comprendido algo, se expande de tal forma que jamás puede volver a su tamaño original.

 

Incluso en nuestro México mágico se bromea mucho entre amigos, diciendo: «se ve que quieres a tu hijo, como si fuera tuyo». Y las Respuestas a tal broma son por demás variadas e ingeniosas, pero lo importante es que en realidad el ser padre biológico no tiene mayor importancia. De hecho ser padreo madre biológicos no requiere mayor ciencia y hasta la persona menos preparada Y con la escala de valores más baja podría serlo, pero ser «Padre o Madre», de verdad, no tiene nada que ver con la biología.

No se estudia para ser padreo madre y siempre cometemos graves errores en la tarea de educar a nuestros hijos. Joan Manuel Serrat en su hermosa canción » Esos locos bajitos», nos transmite con su acostumbrada sensibilidad, ciertos puntos sobre la complejidad del tema y menciona un sinfín de las afectaciones que causamos De la manera más inconsciente y amorosa en el ejercicio de nuestra paternidad, pero es motivo de otra reflexión.

 

Cosas curiosas sobre la paternidad son como aquella que dice la sabiduría popular que dice:  «Cuando un hombre comprende que su padre tenía razón, ya tiene un hijo que piensa que su padre está equivocado. En definitiva la tarea de ser padres es muy compleja y requiere de gran esfuerzo, pero la alegría que da el serlo es una de las cosas que más puede llenar el espíritu de un ser humano.

 

Concluyendo con la reflexión que nos ocupa, me atrevo a decir que hay muchos padres biológicos que no son padres y muchos si no es que todos los padres adoptivos, lo son en verdad, porque no cabe ni la menor duda de que la paternidad/maternidad es una decisión.

Gracias a la música

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Siempre he profesado admiración y respeto por los músicos y yo diría que me generan cierta envidia de la buena, ya que cuando los veo expresarse veo esa metamorfosis que se da en los seres que se logra quizás sólo través del arte y me parece que en la música, en especial.

 

Nunca he tocado bien un instrumento y aunque me dicen que no canto mal, tendría que tomar muchas clases de canto para poder aspirar a hacerlo medianamente bien.

 

Como todo en la vida también admiramos todo aquello de lo cual carecemos y recuerdo que en mi juventud, en alguna ocasión al tomar café con un buen amigo, de esos que hace uno en la adolescencia y con los que desvariamos tratando de descifrar la vida, pero también con los que abrimos el corazón y comentamos aquellas cosas que nos cuestionamos , que nos preocupan o que no entendemos o quisiéramos lograr y le decía a mi amigo Indalecio:

 

“Es que si yo cantara y tocara la guitarra como tu, no habría moza en el mundo que se me resistiera y él riendo me respondía:  «Pero pero mira que pavadas dices, uno de los tipos más populares  a causa del fútbol, quejándose. Por el contrario coño!, te digo que si yo jugara al fútbol como tu, otro gallo me cantara en términos de mi porcentaje de bateo con las niñas.

 

Hoy cuarenta años después cuando lo que importa no es conquistar muchachas y después de un buen rato recorrido, sigo profesando esa misma admiración y respeto por los músicos, sólo que ahora agrego un gran agradecimiento por lo que me ha dado la música al acompañarme a través de todo éste recorrido y por ello le dedico ésta reflexión.

 

Oscar Wilde decía que: El arte de la música es el que más cercano se halla de las lágrimas y de los recuerdos   y vaya que sí. ¿En cuantos momentos hermosos de nuestra vida y quizás en algunos de los momentos más sublimes de nuestra existencia, la música nos ha multiplicado el gozo y la emoción, haciéndolos mágicamente inolvidables  y acuñándoles un sello para siempre?

 

Qué liga más extraordinaria y que infinito agradecimiento no tendré por el resto de mi vida al escuchar a Rachmaninoff  (la música de la película “Pídele al tiempo que vuelva” ) si una de las tardes más hermosas de mi vida, para ser específico, un 4 de Junio del 2005, con los pies descalzos en una bella playa del caribe mexicano tomaba tomaba una de las decisiones más importantes de mi vida, escuchando un violín que nos deleitaba con ello.

 

Cuando una idea me ronda en la cabeza y me siento a escribir escuchando música instrumental, todo se vuelve magia y conecto con el sentimiento y la inspiración, al grado de escribir con fluidez ideas que de otra manera me parece que sería imposible desarrollar.

 

Claro después al leerlas y percatarme que aún cuando hay ideas que pueden interesar, me perdí en el bosque de la imaginación,  vienen las consabidas correcciones y necesarias iteraciones para tratar de lograr expresar de manera clara las mismas, sobre todo en mi caso, que soy un escritor silvestre.

 

Pero lo importante es que esa conexión y ese trance que se logra con la música, dudo mucho que se pudiese lograr sin el apoyo de éste maravilloso arte.

 

Yo dudo que otro arte nos pueda llevar a la conexión mágica a la que nos conduce la música. Daniel Barenboim en su ensayo sobre la música “ El sonido de la vida”, lo manifiesta de la siguiente manera:

 

Escuchar música implica sentir para tratar de entender la narración musical.

Escuchar, pues, es sentir y pensar, más o menos en el mismo sentido en que el sentimiento es emoción y pensamiento.Cuando surge una emoción, ésta no necesariamente tiene que estar vinculada a un acontecimiento o una persona concreta, es la participación del intelecto que vincula la emoción a una serie de circunstancias concretas y genera así un sentimiento. Este mismo proceso se produce cuando escuchamos una pieza musical».

 

Así la música se convierte en un deleite, en una compañera ideal en nuestra vida, una cómplice que nos inspira y nos motiva, que igual nos acompaña en un viaje, en un trayecto al trabajo o como a mi me sucede algo que se vuelve parte de nuestra vida, no sólo en momentos de fiesta, sino en momentos de gran productividad e inspiración.

 

Porque así como es difícil imaginarse una boda sin música, y no imagino a un chofer de esos que manejan largas distancias para transportar mercancias de un lugar a otro, sin la compañía de su música favorita, hay quien utiliza cierta música en un sepelio para darle el último adios a un ser querido; para mí escribir acompañado de buen música instrumental se ha vuelto una necesidad que disfruto me hace estar por siempre agradecido a la música  de los

Carta a Javier “ El Chicharito” Hernández

Javier Hernandez

Para muchos fue un shock tu contratación en el Real Madrid.  No para mí. Si bien me sorprendió, mi primera reacción fue pensar:  “Que valiente eres Chicharito”…. porque no es fácil luchar por varios años por una titularidad en un equipo inglés como el  Manchester United  teniendo tantas cosas en contra y la alternativa de evitarte el mal clíma, la comida… críticas en vez de vivir cómodamente en México al jugar en cualquier equipo ganando igual o más que allá, pero gozando de la gloria de la titularidad y salir en los periódicos como héroe cada semana.

 Si ya te admiraba, ahora te admiro mucho más.  Fuiste al mundial de Brasil a luchar por México. No obstante que te dejaron (en mi opinión) absurda e injustamente como suplente.  Jamás hiciste una declaración que denotara molestia o rencor, tomando gustoso  las oportunidades que te dieron de jugar y demostraste tu valía. cualquiera que entienda un poco de fútbol sabe que el equipo mejoró cada vez que pisaste el terreno de juego.
No eres un virtuoso del manejo del balón, pero la gente que en verdad entiende de futbol sabe que las cualidades que tienes son suficientes para que cualquier presidente de equipo quisiera contar contigo.  La lógica de tu contratación desde un punto de vista netamente futbolístico, en mi opinión es muy simple:  si los campeonatos los gana el equipo que más juegos gana y los juegos los gana el equipo que más goles mete, todo equipo necesita un jugador que su especialidad sea meter goles.
Eso es lo que llamamos en jerga futbolística un “9 natural”  y lo que yo llamo un “ sicario” porque es aquél que deportivamente te aniquila.
Si, además ese sicario es un jugador que es positivo (no conflictivo), es una persona con valores, y representa muchos otros beneficios, pues realmente no cabe duda que debo aplaudir la genialidad de tu contratación.
No obstante todo lo comentado, se requiere de mucho valor de tu parte para tomar la decisión, porque se necesitan agallas y mucha seguridad para aguantar la banca. La banca duele y te resta seguridad.  Lo sé como exjugador… poco la viví, pero le hacía daño a mi autoestima, por eso aún te admiro más. Tu espíritu resiliente, tu perseverancia y extraordinaria actitud son dignas de todo respeto y admiración. Ve guardando y atesorando experiencias.  De ser posible, escribe cada vivencia buena y no tan buena, porque en algún momento de la vida las tendrás para compartirlas y motivar a mucha gente, no sólo en el ámbito deportivo, sino en cualquier otro.
Han salido muchas críticas y burlas, y habrá muchas más.  No voy a mencionar a nadie de los que han aparecido mostrando su falta de calidad con sus comentarios.  Porque, aunque tendría mil argumentos para hacerlos pedazos, ninguno está a la altura de tu calidad moral como ser humano.   Por eso, no ensucio esta carta mencionando ningún nombre. 
Sé que no necesitas que te lo diga, porque siempre nos has dado cátedra de prudencia, humildad y buena voluntad, pero no puedo dejar de pedirte que sigas siendo así y «haz caso omiso de críticas burlas y págales con una sonrisa, metiendo goles y creando oportunidades para tu equipo”.
¿Te felicito con todo mi corazón Chicharito!, estás haciendo historia, y como diría Don Quijote de la Mancha:
«Dejad que los perros ladren porque es señal de que vamos cabalgando”.
 

Guten Tag (Buenos días), Ramón

 

la foto2¿Quién dijo que en ésta vida ya no hay valores? que no se puede tocar temas complejos y de gran preocupación de una manera real pero no burda, de una manera sensible y a la vez alegre y tan profunda que en momentos sientes que te tocan el alma.

 

Cuando se va al cine y el director logra meternos a la historia al grado de transportarnos al mundo que refleja la pantalla y logra conectar con nuestros sentimientos de una manera que pareciera habernos vuelto bipolares, llevándonos de la risa al llanto y viceversa de una manera iterativa, hacemos realmente un escape de la realidad por un par de horas y sentimos que la película cumplió en verdad su cometido.

 

Eso justamente logra  el mexicano Jorge Ramírez-Suárez en la cinta «Guten Tag, Ramón». Mexicano de nacimiento y formación, y alemán adoptado, hacen a Jorge completamente  bi-cultural, lo cual aprovecha de una manera envidiable para plasmar lo bueno y lo no tan bueno de México y los mexicanos, de Alemania y los alemanes en una historia de amor, de amistad y de valores, la cual no sólo invita a ser mejores individuos, sino que nos da esperanza  en la humanidad.

 

«Guten Tag, Ramón» es una cinta imperdible para darnos cuenta de una triste realidad que enfrentan millones de mexicanos como Ramón, que no cuentan con la educación y recursos económicos para salir adelante y se ven en la disyuntiva de emigrar sin papeles a otro país o de incorporarse a las filas delictivas del narcotráfico que es un cancer para el mundo, pero que les ofrece una «alternativa» aparentemente fácil que termina siendo una puerta falsa y que les causa un daño irreversible a ellos y a la sociedad en general.

 

La creatividad del guionista, productor y director nos presenta de una manera excepcional una historia diferente que tiene por escenario un pequeño pueblo del estado de Durango y una bella ciudad en Alemania, ya que por azares de la vida,  Ramón el protagonista de la historia, termina en donde las naturales adversidades terminan por ceder ante la fuerza de la persistencia, la convicción y el carisma de Ramón y el apoyo de gente buena que la vida pone en su camino y de una manera maravillosa la barrera del idioma es superada  por el lenguaje del corazón.

 

Yo le tomé especial cariño a ésta película por varios motivos, el primero quizás es por identificarme de alguna manera con la historia, por haber vivido en Alemania y haber llegado en mis años de formación a un país, entonces totalmente extraño para mí, con una diferencia cultural y de costumbres notable, por no mencionar otras como la climática que hacen difícil la adaptación  y eso que mis condiciones eran  incomparablemente más favorables que las de Ramón.

 

Otra de las circunstancias que me allegan sentimentalmente con la película es haber tenido la gran oportunidad de conocer a Jorge, antes de su filmación. Conocer la historia a nivel proyecto y apostar por su realización, no sólo en el aspecto de su aseguramiento, sino por motivos del financiamiento que se requería y que de conformidad con el  artículo 226 se logró la participación de la empresa para la cual yo laboraba en ese entonces.

 

La historia además de haberse logrado plasmar en la cinta con la fineza y precisión requerida, lo cual demuestra la gran habilidad y conocimiento del cineasta y su equipo, resulta una luz de esperanza en ésta época en la que dudamos de la subsistencia de los valores y se requiere de motivos para seguir creyendo.

 

No te puedes perder ésta bella película!

Algunas enseñanzas de Brasil 2014

IMG_9967Hace algunas semanas publiqué una reflexión en la que mencionaba que en mi opinión. Miguel Herrera no era el líder adecuado para dirigir al equipo representativo de México en el mundial de  futbol de Brasil, hoy lo sigo creyendo.
Cualquiera diría que los resultados lo avalan y tendrían cierta razón, ya que estamos acostumbrados en México a que llegar al cuarto partido(pasar a Octavos de final) es ya un resultado decoroso, lo cual para mí, no lo es.
Si bien esperaba que no ganáramos un sólo partido, me parece que la suerte acompañó al equipo mexicano y los astros se alinearon para que hubiésemos llegado mucho, pero mucho más lejos de lo que llegamos.
En términos de futbol, la gente habla de las grandes sorpresas, para mí al ver los juegos fue evidente cuales equipos se prepararon más que otros, cuales traían una estrategia clara y aquellos que  salieron a improvisar como el caso de México y Brasil y los resultados no se dejaron esperar.
También la suerte jugo su papel y a eso de cierta manera atribuyo que México pasara a la siguiente ronda y que hoy Argentina, vaya a disputar la final con Alemania, porque si por preparación, estrategia y liderazgo se tratara, Holanda hubiese obtenido el pase. Aunque los recursos futbolísticos y el liderazgo de un individuo dentro del terreno de juego por parte de Argentina, inclinaron la balanza a su favor y por supuesto que no me refiero a Messi, quien a quedado a deber todo en éste mundial, sino a  Javier Mascherano quien se echó a cuestas al equipo y ha demostrado que es un gran líder.
Para cuando se publique éste artículo, la final se habrá jugado y si los dioses del futbol y la suerte no influyen demasiado, la lógica es que Alemania se lleve el trofeo a tierras teutonas, acabando con eso de que Europa para los europeos y America para los americanos. Pero aquí lo que es de admirar es el liderazgo, la organización y la estrategia del entrenador alemán y por ello aspiro a que alguien con más calidad y clase dirija a nuestro seleccionado y dejemos que los líderes de telenovela barata dirijan a los equipos locales, propiedad de televisoras y empresarios que privilegian el drama a tener un representativo con clase y seriedad, que no de mejores satisfacciones.
Pero fuera del futbol, las enseñanzas mas significativas son de otro tipo y me parece que es hora de que demos importancia a lo que verdaderamente la tiene y nos ocupemos pro-activamente de aquello que debiese mantener nuestra atención.
En México mientras el mundial roba todo nuestra atención se aprueban reformas estructurales que tendrán importantes repercusiones en diversas materias como comunicación, energía y otros, sin que nadie haga el menor aspaviento por ello.
En la ciudad de México seguimos sufriendo los embates de la pésima administración y planeación de Mancera y sus secuaces con sus obras con las que se hacen millonarios y sus mal planeadas imposiciones de parquímetros, programas de «no circula» y demás aspectos que carecen de congruencia e inteligencia.
Que conste que no estoy en contra de los parquímetros, de un buen programa de control vehicular o de obras de mejora, pero es increíble la mala planeación de las mismas y que asfixien al grado del estrangulamiento a zonas como Polanco, por la  falta de planeación y por transformar vías en las que antes se podía circular en tres carriles, en vías de un sólo carril de circulación, debido a la ambición desmedida por obtener dinero, que se evidencia al pintar zonas de parquímetros de ambos lados de la calle.
Vale también la observación de que soy un fiel creyente de que una sociedad civilizada no aquella en que la las familias pobres tienen auto, sino aquella en la que los ricos usan el transporte público.
Y para concluir con la reflexión,me parece que nos hubiese resultado más provechoso un fracaso rotundo y que no se hubiese logrado el mediocre resultado que se obtuvo, porque se hubiese evidenciado la mala planeación y como se privilegian dentro de nuestro futbol los intereses económicos.
Al igual que a Brasil le hará mejor el resultado de la paliza que le propinó Alemania despachándolo de la justa deportiva a que hubiese sido campeón, ayudado por la FIFA con un equipo mediocre y mal estructurado  y siguiera el pueblo brasileño en el sueño de opio, pensando que son los reyes del mundo por ser campeones de futbol, mientras se sigue muriendo de hambre la gente y se hacen mayores las diferencias entre las clases sociales.
Hoy la realidad es que le salió mal a su presidenta la tirada y hoy la gente estará aún más inconforme de que se hayan dilapidado billones de dólares en estadios que se habrán usado para tres juegos y se quedarán como uno de los más evidentes monumentos a la estupidez humana, cuando pudieron haber sido invertidos en obra social tan necesaria.
Pero es hora de que tanto brasileños, como mexicanos despertemos del marasmo en el que nos encontramos y dejemos de tolerar gobernantes corruptos que se enriquecen descaradamente, mientras, nos dan «Pan y circo» a  sus mandatarios (al menos según lo que significa la palabra  «Democracia»).

“Lo que nos define”

Resilencia 
 
 
Tener conocimiento nos sirve si lo sabemos utilizar; inclusive hay personas que pueden tener doctorados y conocer ampliamente un sin fin de temas, mas eso no los define como persona.
 
Podemos tener éxito en lo que hacemos y nos dará satisfacción; pero tampoco nos define como personas.
 
Tener dinero puede ser útil y, si lo sabemos emplear, darnos un nivel de vida muy agradable; no obstante, tener todo el oro del mundo no nos define como personas. 
 
Podemos tener una gran pareja, que puede sernos fiel o no, que puede amarnos mucho o poco  y eso sigue sin definirnos como personas.
 
Podemos tener hermosos hijos que pueden amarnos y admirarnos mucho o poco, lo cual nos dará también alimento para el alma,  pero eso, tampoco nos define en la vida.
 
Podemos tener una buena posición, un buen nombre y reconocimiento, ya sea de la sociedad, del medio en que nos desenvolvemos, o de nuestros familiares y amigos, lo cual puede ser muy agradable y halagar nuestro ego, mas eso tampoco nos define.
 
Los recursos intelectuales que hayamos desarrollado, nos ayudarán a entender mejor y a seguir avanzando. Podemos tener recursos  emocionales que hayamos forjado  a través de nuestro caminar por la vida, lo cual nos ayudará en gran medida a ser felices o a evitar el sufrimiento a raíz de las circunstancias que se nos presenten.
 
Entonces, ¿qué es lo que realmente nos define?  
 
Lo que en verdad nos define como personas y como seres humanos, es:
 
Nuestra “actitud hacia la vida”, la forma como tomamos todo aquello que nos sucede y asumimos nuestra responsabilidad como consecuencia de nuestros actos y también de los actos de otros, sin sentirnos víctimas de las circunstancias.

  

 
El “poder de resiliencia”  que hayamos desarrollado a través de las vicisitudes y obstáculos…  La fortaleza para levantarnos una y otra vez después de las caídas. 
 
El “amor que sintamos y expresemos” a nuestro alrededor, lo cual será parte del legado que dejemos a nuestro paso por la vida.
 
 Porque, al final, no importará cuantos bienes  dejemos, lo que importará es cuántas almas tocamos para bien y con qué profundidad. Y, por supuesto,  el ejemplo que hayamos reflejado para que las personas en las que hayamos influido sean más felices y hagan un mundo mejor, gracias a su interacción con nosotros.
 
Eso, es lo que nos define.

Ni Hala Madrid… ni Visca Barsa !

la foto

 

Ni Hala Madrid… ni Visca Barsa !

 

Es increíble lo que sucede de repente con ciertos fenómenos, pero lo que viví este fin de semana con la final de fútbol de la copa de Campeones de Europa es de llamar la atención.

 

Quiero aclarar que yo no tengo equipo de fútbol, ni en México, ni en otro país, aún habiendo jugado en mis mocedades en el Club Atlante, aún habiendo vivido en München y teniendo a la mano al famoso Bayern, ni por haberme desarrollado en mi infancia en la colonia española en México y ser miembro toda mi vida del Deportivo Asturiano. Aunque como dice Serrat, en su bella canción cada loco con su tema, si me das a escoger tengo mucho más simpatía por la filosofía del Barcelona, que por la del Real Madrid, sin ser un detractor de este último, ya que ambas son grandes instituciones y dan un gran espectáculo y habría que añadir que mi madre era la fan número 1 del Barsa.

 

Me gusta hacer la polémica futbolística en las redes sociales, invitando a muchos amigos a  compartir sus puntos de vista, discutiendo acaloradamente sobre nuestras formas tan distintas de ver las cosas,

pero tratando de ser muy respetuoso y  con la premisa de que mientras más diversas sean las posiciones, más enseñanza nos pueden dejar.

 

Sin embargo ver las reacciones de algunos partidarios del Real Madrid y otros del archi-rival Barcelona me llaman mucho la atención. Es increíble como pasan de un momento a otro al insulto y a retar a golpes a los “rivales” defendiendo a ultranza unos colores y a un puñado de jugadores, como si les fuera en ello la vida.

 

La vida es mucho más que eso y para invitarlos a la reflexión me gustaría contarles una historia real de la cual podemos aprender mucho.

 

Muchos piensan que la vida de los famosos es maravillosa, sin problema alguno o llegamos a pensar que su vida es vacía, frívola, que carecen de sentimientos y buenos actos, pero hay seres humanos maravillosos y capaces de conmover al mas duro y despreocupado ser humano. Esta es una historia real de la nobleza humana, que debería de servirnos de inspiración.

Esta maravillosa historia que quizás no muchos conocen, se refiere a dos, de los tres tenores Lucciano Pavarotti, José Carreras y Plácido Domingo, que emocionaron al mundo cantando juntos. La rivalidad que todo el mundo conoce, entre los Catalanes y los Madrileños, que viene en mucho de que los catalanes luchan por su autonomía en una España dominada por Madrid, hizo que  Plácido Domingo que es madrileño y José Carreras que es Catalán, se enemistaran de una manera excepcional en 1984.  Carreras y Domingo se volvieron enemigos. Siempre muy solicitados en todas partes del mundo, ambos hacían constar en sus contratos, que sólo se presentarían en determinado espectáculo, si el adversario no fuese invitado… En 1987, a Carreras le apareció un enemigo mucho más implacable que su rival Plácido Domingo; lo sorprendió un diagnóstico terrible, leucemia.

 

Su lucha contra el cáncer fue muy sufrida, se sometió a varios tratamientos, además del trasplante de la médula ósea. El cambio de sangre que lo obligaba a viajar una vez por mes a Estados Unidos, no le permitía trabajar en esas condiciones y a pesar de ser dueño de una razonable fortuna, los altos costos de los viajes y de los tratamientos debilitaron sus finanzas. Cuando no tuvo más condiciones financieras tomó conocimiento de la existencia de una fundación en Madrid, cuya finalidad única, era apoyar el tratamiento de enfermos de leucemia. Gracias al apoyo de la fundación “HERMOSA”, Carreras venció la dolencia y volvió a cantar. Recibió nuevamente los altos honores que merecía y trato de asociarse a la fundación que le había salvado la vida para tratar de devolver de alguna manera algo de la invariable ayuda que había recibido, pero sin éxito alguno.   Al leer sus estatutos, descubrió que el fundador, mayor colaborador y presidente de la fundación era Plácido Domingo. Luego, supo que éste había creado la entidad en principio, para atenderlo y que se había mantenido en el anonimato para que no se sintiera humillado por aceptar auxilio de su enemigo. Aún más  conmovedor fue el encuentro de los dos. Sorprendiendo a Plácido en una de sus presentaciones en Madrid, Carreras interrumpió el evento y humildemente arrodillándose a sus pies le pidió disculpas y le agradeció públicamente. Plácido lo ayudo a levantarse, y con un fuerte abrazo sellaron el inicio de una gran amistad.

 

En una entrevista a Plácido Domingo, le preguntaron el por qué había creado la fundación “HERMOSA” en un momento que, además de beneficiar a un enemigo, había ayudado al único artista que podría hacerle competencia, su respuesta fue corta y definitiva… “Porque el mundo no se puede perder una voz como esa”

Ante un ejemplo como ese, me encantaría invitar a reflexionar a todos los que montan en cólera por defender o atacar unos colores, una institución y al final del día un equipo de fútbol y no me queda más que decir: “Ni Hala Madrid, ni visca Barsa … mejor amigos para siempre”.

 

Gracias